miércoles, 8 de octubre de 2008

Mi abuelo es un superhéroe




Mi abuelo es un superhéroe. Siempre está pensando en todo y en todos y nunca se olvida de lo que hacemos. Está pendiente de que siempre estemos bien y nada nos falte. Puede ver donde nosotros no. Puede estar donde nadie más. Y hace que estemos donde él está.

Mi abuelo siempre ha luchado desde niño y a resistido valientemente el no tener a su padre cerca para cuidarlo o enseñarle a caminar y el camino. Ha vendido frutas en una canastita pequeña, descalzo o con zapatos rotos, caminando muchos kilómetros al día para ganar unos centavos y dárselos a su mamá, ya de tarde y sin muestras de cansancio. Sus poderes lo ayudaban a seguir con ganas de jugar como los otros niños y correr y correr por el piso de tierra y piedritas pequeñas.

Mi abuelo es un superhéroe y en su adolescencia sirvió al país dejando su casa y a su madre teniendo a las justas la mayoría de edad y por decisión propia. Cuando ningún muchacho mayor que él quería – ¿y quién está dispuesto a irse de su casa “solo” por defender a la patria aun hoy?-. Seguro llevaba su traje especial escondido y sin ningún temor se lo pidió personalmente al oficial de mayor rango que seleccionaba a la tropa.

A pesar de no poder estudiar más, logró ser profesor de Educación Física, hoy el más antiguo de la provincia (Chepén, La Libertad) y quizá del departamento. Y cada vez que alguien lo ve no duda en mostrarle su agradecimiento. El año pasado fue condecorado por el Alcalde de la ciudad y él con la sencillez de siempre hasta dio un pequeño discurso. “Que los profesores de hoy no se olviden la importancia del cuerpo sano en mente sana”, les dijo.

También enseñó dibujo y pintura, no sé hasta ahora como aprendió a hacerlo tan bien. ¡Son súper poderes! ¡No tengo otra explicación!

Él nunca se queja de algún dolor o achaque de la edad, su fuerza es increíble. Pese a su diabetes, úlcera, sordera accidental, ceguera (por la diabetes), sigue de pie y haciéndonos reír con sus ocurrencias, combatiendo al mal humor y al desgano. Siempre está con la frente en alto. Siempre.

Mi abuelo es un superhéroe, cuando estamos lejos y regresamos nos espera con una gran sonrisa y los brazos abiertos, sin preguntar algo más que “cómo nos ha ido”, nunca “por qué te fuiste”. Seguro nos puede ver con algún poder especial que va más allá de lo que sus ojos cansados parecen lograr hoy.

Nos ha hecho aprender muchas cosas durante la vida que en ninguna universidad se podría. La sencillez, la honradez, cumplir con los tratos, la puntualidad, la unidad de la familia…

Ahora ya está en sus “cuarteles de invierno”, pero igual nunca ha dejado de luchar y de enseñar que siempre se debe estar de pie. Y ya tiene más de 98 años.

Mi abuelo se llama Juan León Meza y es un verdadero superhéroe.



Nota: Y hoy 8 de Octubre, quiero también recordar a mi héroe favorito: Miguel Grau. Valiente y caballero. Porque si se adoptan héroes y superhéroes de cómics -y hasta congresistas para vigilarlos de sus malas prácticas- ¿por qué no puedo adoptar a un verdadero héroe como mi favorito?






1 comentario:

Anónimo dijo...

Siempre tenemos mas cerca de lo que pensamos a un héroe. Me ha encantado la historia. Suerte en 20 minutos, donde tambien concurso en cine.