viernes, 12 de junio de 2009

Me doy cuenta

Me doy cuenta del tiempo, del momento, y de tus manos recorriéndome. Estoy consciente que las escenas son similares, a las del cine y las de nuestros recuerdos. Y no me parece extraño que tu mirada esté intentando cruzarme, queriendo encontrarme y no dejarme. Sé que las líneas que nos han separado han sido muy claras, pero que cuando quisimos las borramos como si nada. Tus manos lo saben y me doy cuenta.

Me doy cuenta en los abrazos, que hoy se suponen nuevos, y en tu fragancia que no cambia, por suerte. Lo sé cuando aún no termina el saludo y mi nariz toma tu viento. Sé que te miro y a pesar que no quiera hacerlo por momentos, tus ojos me buscan. Estoy convencido que mucho se transforma con los años, pero hay una esencia que no, muy dentro. Y sé que eso es lo que aparece cada vez que nos encontramos. Y tus manos lo saben muy bien, me doy cuenta.

Me doy cuenta en los labios que besan igual en el tiempo, acompañados de una sonrisa cómplice. Sé que al inicio es sorpresa y duda, “porque nunca se sabe conmigo”, pero es más la fuerza de la piel que se atreve a sentir e ir lejos. Y no estoy preparado pero tampoco asustado, aunque tus brazos me tengan casi atrapado en la oscuridad de la sala. Estoy seguro que también sabes que no será algo que se repita así nomás, me doy cuenta.


**Un post que estuvo guardado por algunos días (¿o meses?), por algunas razones, pero que lo hice en "un segundo" y con "un solo sentido" y un "solo sentimiento", que me gusta mucho. Bonita noche aquella. Espero me disculpen la tardanza ¿Nunca es tarde?¿No?

1 comentario:

Anónimo dijo...

No, nunca es tarde.